el dìa finalizò mas que bien, direbbe ottimo

Es bueno saber que vamos a comer cuando nos toca la cena en un restaurant, porque las tentaciones no dejaràn de venir, cosa que me sucediò ayer, era de esperar.

Hago un poco de historia

♥♥♥

Cuando lleguè a este bendito paìs, Italia, se usaba( digo suaba porque ya conmigo esta tradiciòn no va) el ir a cenar fuori, todos deberìan de centrarse en un mismo tipo de comida, por ejemplo, si era una pizzeria, o comìas una pizza, o verduras, no era bien visto que pidieses una bisteca, porque al final del conto, se hacìa una suma, y todo era pagado en partes iguales.

Una vez me puse a meditar y me dije: Pero que hago yo, con peso extras, comiendo aquello que come la flaca?!! QUE VA!! y ahì me saliò el cubaneo, comencè a tomar conciencia de mis platos, y me dije, ensalada y punto, ( aquì las preparan bastante buenas)

Ayer, no fuè un dìa alejado a lo del pasado, fuìmos a cena, ya hiba con mi menù pronto, dije, como pescaco con verduras, o carne magra con verduras y se acabò la historia.

Me vestì como querìa, un punto mas para mi autoestima y nos fuìmos de parranda, llegando al lugar, vì la carta( donde ponen el menù) y me dije: Comerè el bistec argentino, bien cocido, y pedirè mis verduras cocidas.

g.L me dice. Oye, por un dìa que saltes la dieta ( la palabra tentadora) No pasa nada, es bueno tomarse las coca colas porque es buena( otra cosa que yo, erika no acpeto para mi) el frito con olio d'oliva va bueno( otra cosa que yo evito, sobre todo en estos tiempos) en conclusiòn, ellos comieron su comida onta( llena de grasas) y yo y mi marido, la carne con verduras.

ahì no termina la cosa, llega la hora del dulce, ayy, como hacìa yo, come pan, hasta reventar, come la pasta, come el dulce, nunca finalizaba sin el dulce,,, cuando vì la gran variedad de los mismos( la pasteleria italiana para mie s la mejor) me dije, CERO DULCES, CERO PAN,

No me interesò los comentarios del invito a desviarme de mi visiòn, tengo que seguir siendo fuerte, y aprender a amarme yo, porque nadie haràe sto por mi, recoerdando siempre que el peso mìo lo llevo yo, y nadie mas.

Al fianl de todo mi marido me dice: Sono orgoglioso di te, estas palabras fuerpn otro punto mas para mi, para sentirme una persona especial, sabiendo que estoy caminando bien, a pesar de los tropiezos, he podido saltarlos, vencerlos.

UN dìa fatastico.

Basta tradiciones de que si tenemos que comer esto, o lo como para estar como el grupo, cada vez que me venga ese pensamiento, me podnrè la pregunta: Cuantos son obesos? Ninguno, entocnes, ellos que sigan con su comida llena de grasa, que yo seguirè con mi mùsica y caso cerrado.